La accesibilidad en la edificación no sólo es una cuestión legal, sino también un imperativo moral y social. Los profesionales de la arquitectura tienen la responsabilidad de diseñar espacios que sean inclusivos y habitables para todas las personas, independientemente de su condición física o funcional. La accesibilidad no sólo beneficia a las personas con discapacidad, sino que también mejora la calidad de vida de toda la comunidad. Es importante que el colectivo profesional de la arquitectura se mantenga actualizado sobre las normativas y subvenciones disponibles para poder ofrecer soluciones accesibles e innovadoras en sus proyectos.

En este sentido, las ayudas de mejora de la accesibilidad a las viviendas del Plan estatal de Vivienda que cada año convocan las comunidades autónomas son recibidas como agua de mayo. En estos momentos, las bases reguladoras para la concesión de subvenciones del Plan estatal de Vivienda para el ejercicio 2024 se encuentran a la espera de aprobación.

En la Comunitat Valenciana, la Generalitat ha convocado recientemente ayudas por valor de 3,7 millones de euros para actuaciones de accesibilidad en casas consistoriales y otros edificios municipales. Estas subvenciones están destinadas a municipios y entidades locales menores, cuya población no alcance los 50.000 habitantes y tienen como objetivo la eliminación de barreras arquitectónicas de edificios públicos, de propiedad municipal o cedidos por otras administraciones, con el fin de hacerlos accesibles a personas mayores, con discapacidad o diversidad funcional.

Por su parte, el Instituto Valenciano de la Edificación, bajo convenio con las distintas Consellerias competentes en materia de vivienda, ha desarrollado diversos instrumentos para facilitar a los profesionales la mejora de la accesibilidad del parque edificado.

Productos IVE relacionados

“Me cambiaría la vida el simple hecho de tener un ascensor, sería mucho más libre”.

José, Juan, Nuria, Manuel, Esperanza, y un largo etcétera de personas en España (hasta 100.000, según el estudio realizado por la Fundación Mutua de Propietarios) presentan serias dificultades para salir de sus viviendas por la falta de accesibilidad del edificio, y principalmente por la falta de ascensor.

Y es que como decíamos al principio, las ayudas a la accesibilidad son esperadas como agua de mayo por las personas que más las necesitan, como demuestran diversos testimonios y artículos en prensa que se recopilan a continuación:

-Solo el 0,6% de los edificios de viviendas en España son universalmente accesibles: «Estamos muy lejos del objetivo» (leer noticia)

-Cuando salir de casa es una odisea: atrapados por falta de accesibilidad (leer noticia)

-Un enfermo de ELA, atrapado en su propia vivienda al vivir en un cuarto sin ascensor (leer noticia)

-33 escalones con Manuel en brazos (leer noticia)

En conclusión, las recientes convocatorias de ayudas por parte de la Generalitat Valenciana y otras instituciones demuestran un paso significativo hacia la construcción de entornos más inclusivos y accesibles en nuestros municipios. Sin embargo, queda aún un largo camino por recorrer para alcanzar la plena universalidad en el acceso a los espacios públicos y privados.